150 Años y aún en Plenitud

En esta foto, en la cual tengo 3 años, estoy tocando con la ayuda de mi mama mis primeras notas en un arpa Erard. En mis primeros años no podía entender el celo con que mi madre cuidaba con tanto espero y cariño ese instrumento, hoy puedo contar las razones  de dicho proceder, ya que he podido aprender algo de su historia, y asombrarme de su antigüedad.

¡El arpa de la foto tiene 150 años de edad!

Breve reseña sobre el Arpa.

El arpa es uno de los instrumentos musicales más antiguos del mundo. Las primeras arpas se desarrollaron a partir de arco de caza.

En pinturas encontradas en tumbas egipcias datadas aproximadamente 3000 años AC se muestran representaciones de un instrumento que se asemeja mucho a un arpa actual, el pilar que nos encontramos en arpas modernas.

El arpa angular llegó a Egipto desde Asia alrededor de 1500 años AC. Las cuerdas, estaban hechas de pelo de animales o fibra de plantas, se afinaban por el tipo de nudos que las sujetaban al armazón.

De estos primeros tipos de arpas evolucionaron otros en distintas partes del mundo.

Los más conocidos son:

Arpa celta

Se utilizaron materiales más rígidos de cuerda como el cobre y el latón, estos cambios permitieron que el instrumento pueda producir un mayor volumen y tonos más largos y sostenidos. Las pinturas de estas arpas aparecen en muchos manuscritos tempranos y sus formas casi no difieren de las de las arpas celtas que aún se tocan hoy.

Estos instrumentos eran parte importante de la vida en la antigua Irlanda y el arpa era un instrumento aristocrático, se escuchaba en las cortes de los reyes y ante los jefes de los clanes. Los arpistas tenían que ser capaces de producir emociones diferentes en su público: Risas, lágrimas y en ocasiones provocar les sueño. Con la anglicanización de la nobleza irlandesa, los arpistas tradicionales se convirtieron en juglares y músicos de la calle recitando poesía y cantando canciones populares con acompañamiento de sus arpas.

Arpa de pedal de acción individual

Alrededor del año 1700 se desarrolló un mecanismo con el fin de satisfacer las crecientes demandas de los arpistas de un instrumento que fuera capaz de una gama más amplia de sonidos. Se incorporaron siete pedales en la base del arpa, que cambiaban la tensión de las cuerdas para producir una mayor variedad tonal. Al usar los pies para accionar estos pedales se ganó velocidad de ejecución y complejidad de notas. Este fue el nacimiento del arpa de acción individual.  

Esta alcanzó gran popularidad en todo el mundo alrededor del siglo 18.

 Como ejemplo sobresaliente  se encuentra la corte francesa de Marie Antonieta. Las arpas de este período fueron magníficamente decoradas con relieve, detalles en oro y piedras y pintadas a mano. Además de ser los instrumentos musicales que fueron, sin duda, son muy apreciadas como objeto de arte cuando se mostraban en los salones dorados de la época y en la actualidad.

Arpa de pedal de doble acción

Sebastián Erard rediseñó el mecanismo de acción único, en sustitución de los puntos altos con dos discos de puntas giratorias. Las cuerdas, están ahora cada una equipada con dos discos, y son capaces de producir un piso, natural y un fuerte dependiendo de la posición del pedal correspondiente, permitiendo que el arpista pueda jugar con todos los tonos.

Este ingenioso invento revolucionó el arpa y todavía está en uso hasta el día de hoy.

De la época medieval a los tiempos modernos, desde la música clásica hasta el jazz, desde el acústico al electrónico, el arpa es un instrumento de gran tradición y para muchos, más que un instrumento, es una vocación. 

Suhr Nadine 3ero "A"